martes, 19 de enero de 2010

CLÁSICOS del HUMOR: ANACLETO

Guión: Vázquez

Dibujo: Vázquez

Editorial: RBA

Formato: Libro Cartoné. 200 Páginas

Precio: 9.95€

Calificación: 9/10

Todo aquel que me haya leído en alguna ocasión, sabe que mi presente pijamista esconde un pasado españolísimo, marcado por la editorial Bruguera y sus personajes más emblemáticos, y es que uno leyó Mortadelo antes que Iron Man, y Pulgarcito antes que Batman. Pues bien, el pasado año la editorial RBA lanzaba un coleccionable en los quioscos repasando algunos de estos personajes durante 40 entregas, en ediciones de tapa dura y bastante cuidadas.


Como un amigo y apañero del blog me puso sobre aviso (gracias mil, Nacho) pude hacerme con bastantes entregas de la colección, y volver a disfrutar de personajes casi olvidados, con los que pasé horas y horas de aquellos años (¿os acordáis cuando un tebeo te duraba un día entero?). El caso es que, si ustedes me lo permiten, y muy de vez en cuando para no aburrir a nuestros fieles lectores, echaré mano de nostalgia para recomicdaros aquellas primeras lecturas.


El primero de estos ejercicios de nostalgia ha resultado ser Anacleto. Creado por Manuel Vázquez en 1964, Anacleto, Agente Secreto nacía como una clara parodia del género de espías en general, y de James Bond o el Super Agente 86 en particular. Ya metidos en faena, y tomando como referencia la edición publicada por RBA, nos encontramos con algunas de sus primeras historias, aparecidas en la revista Pulgarcito, todas ellas de una página de extensión, y con un sentido del humor e incluso gráfico muy cercano a Ibáñez y sus Mortadelo y Filemón.


A continuación, se incluye una de sus historietas más recordadas, de mayor extensión que las anteriores, llegando a las doce páginas, titulada Conspiración Blanca, donde el villano de la función, encarnado por el propio autor, ha decidido hacerse con todo el bicarbonato del mercado, para luego revenderlo a precios millonarios. Esto da una idea de por donde van los tiros con respecto al personaje, aunque siga andando caminos ya iniciados por Ibáñez, como el desenlace de la historia, donde Anacleto ha decidido fugarse al Polo Norte después de haber estallado cuando su jefe le ha pedido un poco de bicarbonato, al igual que les sucedía a los famosos agentes de la TIA.


El resto de historias del volumen, de unas seis páginas de extensión, siguen los patrones de los tebeos de la época, con pasajes secretos en los troncos de los árboles, mafiosos con aspecto de gorilas, malentendidos en las misiones que le encargan, y demás genialidades de unos guiones destinados sin duda a un público juvenil. Eso no significa que uno se aburra con esta lectura. Todo lo contrario, porque sólo aquí podemos encontrar como nuestro protagonista se cena a un compañero al que han convertido en cubito de caldo, entradas secretas tapiadas, esbirros que deciden comerse el pulpo que debía ser su trampa mortal, o la aparición de Popeye el Marino.


La única pega que puedo poner a este entretenido tomo es no haber incluido el que era mi chiste favorito del personaje: cuando Anacleto caía en picado a bordo de una avioneta, hacia una muerte segura, y se salvaba en el último minuto, al dar un pequeño saltito cuando la avioneta estaba a medio metro del suelo, aterrizando tranquilamente. Una verdadera lástima...


Jose (31)

5 comentarios:

Nacho dijo...

Aquí estamos hablando del genial VAZQUEZ, y éso son palabras mayores.

Por cierto, un tironcillo de orejas a los señores de Glenat, que aún seguimos esperando ése integral de Lo Peor de Vazquez que se anunció para agosto del pasado año...

Saludos!

sebelo2 dijo...

El integral se retrasó hasta nueva orden (lo mismo para el Salón se deciden)pero eso no quita para que lo reclamemos desde aquí con fuerza, porque Vázquez, como bien dices, es harina de otro costal.
Saludetes,
Sergio
P.D: ¡ah!, gran recomicdación Jose

Marione dijo...

Que gran colección este de los Clásicos de Bruguera. A lo tonto nos hemos podido hacer con autenticas joyitas que ni en nuestros mejores sueños.

Este de Anacleto es francamente. Ademas eso de redescubrir miles de años despues algunas viñetas que tenias escondidas en un hueco de la memoria es un pasote.

Menudo atajo de nostalgicos viejunos estamos hechos.

Saludazos

Toni dijo...

atentos habra que estar a la peli que estan haciendo.
Saludos.

Jose dijo...

Pues sí, familia. Grandes tebeos los de esa epoca, y sobre todo si los acompañamos de esa nostalgia que casi nos saca la lagrimilla.

Habrá que estar pendientes del tomo de Vazquez, porque sus historias de "Vamonos al Bingo" no tiene desperdidicio.

Un abrazo a todos.