Dibujo: Luis Bustos
Editorial: dib-buks
Formato: Álbum Rústica. 48 Páginas
Precio: 12€
Calificación: 8/10
Teniendo en cuenta que mi primer contacto con la obra de Luis Bustos fue con Endurance, resulta tremendamente sorprendente lo que un mismo autor es capaz de conseguir en este universo que es el noveno arte. Si en el relato de la expedición Shackleton, Bustos alcanzaba tremendas cotas de dramatismo y lograba implicar al público en la tremenda odisea que aquellos británicos que iban a la conquista de la Antártida tuvieron que sufrir; aquí en Zorgo, Bustos deja de lado toda posible carga dramática para centrarse en algo que, visto lo visto, se le da a las mil maravillas: hacer reir.
Para ello, el artista echa mano de uno de esos arquetípicos supervillanos (aunque este de súper tiene más bien poquito) de cómic que tan acostumbrados estamos a ver en las series de superhéroes, y se dedica durante las hilarantes cuarenta y ocho páginas de que consta el volumen a ridiculizarlo a golpe de historia corta. El resultado es un tebeo cuyo único y honroso fin es que el lector se mee de risa (bueno, quizás no sea muy honroso eso de mojar la ropa interior, pero en fin...). Para ello, Bustos echa mano de todo aquello que le viene a la cabeza, desde que a Zorgo se le descomponga el estomágo en medio de una pelea con el héroe de turno, a que se le olviden las llaves de la mega-cerradura de la puerta de su guarida, pasando por diversos y brillantes homenajes a películas como El Padrino o Con Faldas y la lo Loco o por los poco ortodoxos métodos con los que vence a sus enemigos (lo de la piel de plátano es genial); todo ello envuelto en un reconocible y desenfadado trazo que hace de este segundo volumen de Zorgo una auténtica delicia para leer en uno de esos muchos ratos en los que uno sólo tiene ganas de olvidarse de todo.
Para ello, el artista echa mano de uno de esos arquetípicos supervillanos (aunque este de súper tiene más bien poquito) de cómic que tan acostumbrados estamos a ver en las series de superhéroes, y se dedica durante las hilarantes cuarenta y ocho páginas de que consta el volumen a ridiculizarlo a golpe de historia corta. El resultado es un tebeo cuyo único y honroso fin es que el lector se mee de risa (bueno, quizás no sea muy honroso eso de mojar la ropa interior, pero en fin...). Para ello, Bustos echa mano de todo aquello que le viene a la cabeza, desde que a Zorgo se le descomponga el estomágo en medio de una pelea con el héroe de turno, a que se le olviden las llaves de la mega-cerradura de la puerta de su guarida, pasando por diversos y brillantes homenajes a películas como El Padrino o Con Faldas y la lo Loco o por los poco ortodoxos métodos con los que vence a sus enemigos (lo de la piel de plátano es genial); todo ello envuelto en un reconocible y desenfadado trazo que hace de este segundo volumen de Zorgo una auténtica delicia para leer en uno de esos muchos ratos en los que uno sólo tiene ganas de olvidarse de todo.
Sergio Benítez (327)
3 comentarios:
Pues éste "nole"...
Lo que me resulta curioso es la promoción que se le ha dado en multitud de blogs, y en cambio ni tan siquiera me suena que existiese un primer volumen...
Saludos!
Tres cuartos de lo mismo Nachete, ya que no sabía de la existencia de este curioso súpervillano hasta que vi que salía el segundo volumen.
Y si puedes hazte con él, te partirás de risa.
Saludetes,
Sergio
Ya somos tres a los que no les suena que existiera un volumen1 xD, pero bueno, mientras se pueda leer da igual que ponga un 2 o un 45.
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