jueves, 10 de diciembre de 2009

KOMA

Guión: Pierre Wazem

Dibujo: Frederik Peeters

Editorial: dib-buks

Formato: 6 Álbumes Cartoné. 48 Páginas c/u

Precio: 12-13€

Calificación: 6.5/10

No se puede decir que no fuera sobre aviso: había leído bastantes reseñas de la serie y todas ellas coincidían en poner en tela de juicio lo episódico de la misma y su extraño carácter, a caballo entre lo infantil y lo adulto. Y por si ello no fuera suficiente, contaba con el comentario de nuestro Toni, que me prevenía ante casi lo mismo sobre lo que coincidían las críticas citadas. Pero claro, era la única lectura que me faltaba de Peeters de cuantas se habían publicado en nuestro país, y la tentación unida a la necesidad (entiéndase esta dentro de nuestros pervertidos estándares) completista hacía de los seis tomos de Koma una compra indeludible sí o sí.

Finalizada su lectura no puedo más que comenzar esta recomicdación dando la razón a todos aquellos que han vertido sus opiniones en la blogosfera acerca del tebeo: Koma es un cómic extraño. Su lectura, aún hecha con bastante más proximidad entre tomo y tomo que la que hicieron aquellos que la siguieron con paciencia mientras era publicada, se hace muy cuesta arriba, sobre todo por la brevedad con la que se consume cada volumen y lo poco de historia que se narra en ellos. La mezcolanza que Wazem hace entre el inicial carácter infantil de las aventuras de Addidas y la trascendencia filosófica que estas terminan teniendo en el transcurso de la historia, chocan de frente con ciertas narraciones paralelas (¿a qué viene meter con calzador al comisario?) de poca o nula relevancia en el devenir de los hechos. Dicha mezcla no es la única que chirría por el mal engranaje mediante el que está articulada, siendo el enfrentamiento final de la heroína con el villano de la función, y lo que transcurre al mismo tiempo en ese imposible hotel, otro claro ejemplo de lo pobremente planteados que están los cambios de escenario en el transcurrir de la narración.

Queda claro pues (aunque sea leyendo entre líneas) que es Peeters con su trabajo el que salva en parte el desaguisado del escritor. Constriñéndose de forma consciente a una cuadrícula que varía a su antojo, el dibujante suizo sigue haciendo gala de la enorme naturalidad y capacidad expresiva que siempre acompaña a su dibujo. Es responsabilidad suya además que el climax de la historia y su poética conclusión queden tan bien potenciadas, como también lo es el carisma que desprende la pequeña protagonista, una niña con un desparpajo y una frescura que en manos de un guionista más hábil habría vivido aventuras menos deslavazadas y más vibrantes que este Koma.

Sergio Benítez (329)

5 comentarios:

. . dijo...

Si ya me tiraba para atrás desde hace tiempo, ahora ya me acabo de pegar la culá contra el suelo de tanto imitar al cangrejo.

Otro que se queda en los estantes de la librería...

Saludos!

Beguetti dijo...

Pues me acabas de dar un palito, tengo reservado en mi librería el estuche desde hace un tiempo y lo iba a recoger esta misma semana....me queda el consuelo de Peeters.

Angux dijo...

Una serie que ( a mi gusto) va empeorando número a número. El primero de ellos me hizo creer que el resto merecería la pena... luego cal y arena.

Un saludo.

Marione dijo...

Esta mañana en la Fnac he tenido en mis manos un tomo de Astiberri que se llama Paquidermo. ¿Sabes algo acerca de?

Es de Peeters y los dibujos son mu bonitos. Hasta aqui puedo leer.

Saludazos

sebelo2 dijo...

Por supuesto que sé algo, que es la última novedad de Peeters y que tiene una pinta acojonante...como todo lo de él. En cuanto lo lea te daré más datos.
Y en cuanto al Koma poco más puede decirse a parte de que es una lástima que el guión desluzca tanto la labor gráfica de Peeters.
Saludetes a todos,
Sergio