martes, 25 de noviembre de 2008

TRES SOMBRAS

Guión y Dibujo: Cyril Pedrosa

Editorial: Norma

Formato: Libro Rústica. 272 Páginas

Precio: 22€

Calificación: 8.5/10

Resulta curioso cómo los amigos comenzamos a desarrollar, desde muy temprano, ciertos códigos que sólo nosotros podemos entender y que, probablemente, sólo a nosotros nos parecen hilarantes. Algo así nos pasa a Mario y a un servidor. Cuando quiera que hayamos leído algún cómic o visto alguna película que nos ha llenado por completo pero no es una obra maestra, nuestro código es muy simple "qué película más bonita" o "qué cómic más bonito". Eso es suficiente para que nos riamos un buen rato, por más que a vosotros, que ahora estáis leyendo esto, os pueda parecer una soberana estupidez (y no dudo que lo sea, ojo).

Pues bien, esta pequeña historieta que me ha servido para arrancar la recomicdación de Tres Sombras viene a cuento, evidentemente, porque el presente cómic es "muy bonito". Así, de partida, no se me ocurriría mejor forma de definirlo; aunque es obvio que no voy a dejar la reseña así, más que nada porque el estupendo trabajo de Cyril Pedrosa se merece bastantes líneas más.

El argumento de Tres Sombras (inspirado en la muerte del hijo pequeño de un buen amigo del autor) es bastante simple en apariencia; una simplicidad que conforme va avanzando la lectura comienza a abandonarse tanto en su desarrollo visual como argumental. Pedrosa narra la historia de un padre que para salvar la vida de su hijo de tres misteriosas sombras que vienen a por él, decide huir y cruzar el océano con la esperanza de así evitar tan funesto destino. Con las bases sentadas en el primer tramo de la lectura, el artista comienza pronto a ahondar, siempre a través de la fábula, en conceptos como la muerte o las relaciones paterno-filiales y explora, en esta última, los límites que un padre estaría dispuesto a cruzar para salvaguardar la vida de un hijo guiado por el incondicional amor que siente hacia él. Todo ello envuelto en un halo de irrealidad que hace que la lectura se asemeje muchas veces a los vanos intentos por recordar todos los detalles de un sueño.

Aún así, la simplicidad de la historia que Pedrosa narra es engañosa, puesto que en el terreno visual nos encontramos ante un tebeo fascinante. El dibujo del artista, que no esconde en ningún momento sus influencias disneyanas (se nota que trabajó para la compañía del ratón en Hércules) explora terrenos que van mucho más allá del almibaramiento propio de los dibujos animados. Así, conforme avanza la lectura, podemos observar una menor tendencia figurativa que va abriéndose hacia el mundo abstracto con fuertes inclinaciones por el arte expresionista. El uso de luces, pero sobre todo de sus sombras, es el primer indicativo que acerca Tres Sombras al arte de principios del siglo XX, pero es hacia el final de la lectura cuando realmente se deja sentir esta fuerte incidencia, con unas páginas hipnóticas en las que el desarrope formal provoca un aumento exponencial en la carga de contenidos.

El dolor final con el que los protagonistas de la historia y el lector (ya implicado emocionalmente en la misma) tienen que lidiar es tratado por Pedrosa con sutil maestría, dejando el autor una lección vital sublime que se cierra con tres frases que guardan una carga filosófica imposible de ignorar. El mensaje último del tebeo, de claridad demoledora, es un precioso canto a la vida y el optimismo, y deja al lector con la calma sensación de haber realizado un viaje inigualable y, por supuesto, "muy bonito".

Sergio Benítez (68)

6 comentarios:

Anónimo dijo...

la verdad que me ha gustado mucho toda la fabula y el viaje pero lo que de verdad me ha dejado estupefacto es el dibujo, como acabas implicandote en la historia de estos padres y el hijo a traves del dibujo. Un vistazo por fuera y no llama mucho la atención pero ojo!! cuando lo lees........que maravilla.

sebelo2 dijo...

Y que lo digas nene, y que lo digas. Potito, potito ;).
Saludetes
Sergio

Anónimo dijo...

Pues tiene pinta de ser interesante. Me suelen gustar mucho esas historias emotivas y a la vez optimistas y vitales. (Muy por ejemplo en la línea de Viaje a Italia, que tiene un final muy bonito).
Queda anotado para el futuro. Saludos.

sebelo2 dijo...

Anota, anota, que vale bastante la pena.
Saludetes David,
Sergio

Anónimo dijo...

Y si tienes hijos puede dejarte con un nudo en la garganta.
Pedrosa realmente lo borda con su maravilloso trazo.
Duro y bello. Un gran tebeo.

sebelo2 dijo...

Lo de los hijos me lo había imaginado. Yo tengo sobrina y también se me puso la piel de gallina.
Saludetes
Sergio