Dibujo: Steve Rude
Editorial: Rude Dude Productions
Formato: Comic-book. 56 Páginas
Precio: $4.99
Calificación: 9/10
Veintiocho años. 102 números, cuatro editoriales y un buen puñado de premios (Kirby's, Eisner's, Manning'sy varios más) son algunas de las cifras a la que podríamos reducir uno de los títulos más influyentes del cómic independiente americano de las últimas décadas.
Ideado por Mike Baron y un primerizo Steve Rude allá por 1981, Nexus hizo su primera aparición bajo la desaparecida Capital Comics. En dicho sello serían publicados sus tres primeros números en blanco y negro y los seis primeros en color antes de que la editorial quebrase y la propiedad pasara a First. Ésta, que editó el material en blanco y negro de Capital en forma de novela gráfica (Dios sabe dónde habrá terminado este tomo que tanto trabajo me costó conseguir) publicaría la serie hasta su primer final en el número ochenta, completando así el periodo de tiempo más largo que la cabecera ha estado bajo un mismo sello y asentando la fama del personaje y su dibujante más allá de lo que se podía haber pensado en un principio: en los muchos años que el equipo creativo tardó en concretar los ochenta números, Nexus pasó de ser un desconocido a ser alabado por doquier como una de las cúspides de la ciencia ficción de los años ochenta, algo a lo que la multiplicidad de influencias religiosas, filosóficas, culturales, sociales o políticas que Baron mostraba en los guiones no era ajena; como tampoco lo era el trazo de un Rude que pasó de tosco a desvelarse como uno de los mejores herederos (sino el mejor) de la tradición de Jack Kirby o Steranko con un storytelling siempre en evolución y un dibujo que, a falta de mejores epítetos, resultaba cada vez más fascinante.
Finalizada la estancia en First, que había incluido alguna miniserie y algún que otro spin-off, así como muchos números de relleno (la lentitud de Rude al dibujo es proverbial), sería Dark Horse la que recogería el testigo editorial de las aventuras de Horatio, Sundra, Dave, Judah, Ursula y la inmensa cohorte de secundarios que a lo largo de los años habían salido de la febril imaginación de ambos autores. Pero los tiempos habían cambiado, ya estábamos a principio de los noventa, y el público americano se dejaba encandilar por cómics menos complejos y sesudos que Nexus y con ventas mucho más millonarias que éste. Dicho motivo llevó tanto a Baron y Rude como a los capitostes del caballo negro a una "drástica" decisión: en adelante las aventuras del personaje tendrían lugar en miniseries de dos a cuatro números. Además, para que los nuevos lectores tuvieran fácil acceso al personaje, Dark Horse le encargaba a los creadores un tebeo de no más de cincuenta páginas en el que resumieran, no todo lo anterior (hubiera sido absurdo), sino parte de lo que se contaba en los tres primeros números editados por Capital. Así nacía este Nexus. The Origin (el resto de la historia del personaje lo dejamos para otro día).
Lo que Baron y Rude resumen y pulen aquí responde básicamente al título, narrando en varios tiempos y a través de diversas voces los acontecimientos que llevaron a Nexus a ser quien es. De esta forma, The Origin arranca llevándonos a Vradic, un planeta al borde de la guerra civil en el que Theodore Hellpop, un militar, gobierna con mano de acero. Padre del protagonista, allí también conoceremos a Marlis, su progenitora, atenderemos a su boda, embarazo y precipitado exilio a Ylum, un planeta perdido en el que nacerá Horatio. Desde el momento en el que esto sucede, el narrador pasa de ser anónimo a tomar la voz del que se convertirá en Nexus, pasando los autores como una exhalación por su infancia y adolescencia hasta el momento en el que se transforma en el famoso vengador, mostrándonos además su primera misión. Finalizada esta, la acción da un salto para presentarnos a Sundra, la periodista que se convertirá en mujer del personaje, y cuyas indagaciones darán paso a la tercera y última de las voces que citaba anteriormente, la de Dave, inseparable compañero del protagonista.
Si bien el guión se antoja algo brusco y errático, sea por los continuos saltos en el tiempo, sea porque es directo deudor de lo que Baron escribió diez años antes y de forma mucho menos pulida, lo cierto es que Steve Rude arregla con maestría cualquier entuerto que su compañero le pone en el camino. Suponiendo esta edición Remastered unos ligeros cambios en el color original (y pare usted de contar), lo que no hace falta mejorar en ningún momento es la asombrosa capacidad narrativa del dibujante y su innato talento a la hora de componer la página y colocar el punto de vista, con arriesgadas angulaciones que son marca de la casa y unos lápices suaves a los que las redondeces de las tintas de Gary Martin sientan como anillo al dedo. La capacidad expresiva de Rude, al que no le amedrenta reto ninguno, es palpable en sus tridimensionales personajes, en el asombroso uso de las luces y las sombras y en la facilidad que el autor tiene para asimilar influencias que aglutinan a las citadas más arriba o aquellas de Alex Toth, Alex Raymond o Norman Rockwell, obteniendo como resultado un trazo atemporal que tan pronto se arropa en el clasicismo más arrebatador como encuentra su lugar en las formas del expresionismo.
Inmejorable punto de partida para descubrir a Nexus, este The Origin es uno de esos cómics que por más que se relean nunca cansan, muestra inequívoca de que las cosas, bien hechas, jamás envejecen.
Sergio Benítez (314)
8 comentarios:
A ver que me aclare yo...estás recomicdando el Nexus origin nada más, o toda la serie en general, es que la verdad que mira que he cogido veces los tomos de norma y no me he decidido... un saludo!!!!
Pues todo y nada ;)
El Nexus Origin por el título de la recomicdación; pero en realidad, ya que lo preguntas, la serie al completo (con ciertas excepciones que algún día comentaremos) vale mucho la pena. Aunque al principio Baron se muestre algo torpón a los guiones, Nexus es un clásico de la ciencia-ficción en cómic que nadie debería perderse...y a Rude lo dejamos porque lo de este hombre es punto y aparte :P
Saludetes Neufert,
Sergio
Pongo anónimo por problemas con blogger, pero supongo que sabes quién soy...
¿Sabes ésa sensación que tienes en cuanto ves un comic, te llama la atención, te resulta atractivo y sabes que irremediablemente te va a encantar?
Pues nunca la he tenido con Nexus.
Siempre ha habido algo que me ha repelido y no me he decidido jamás de los jamases a comprar nada del personaje. Es algo parecido a lo que me pasa con Madman...
Saludos!
Cómo para no saber quién eres..hehehe.
Bueno, al margen de un pequeño tirón de orejas por no haberte acercado nunca a Nexus, tengo que confesarte que compartimos esa animosidad extraña contra Madman. De hecho, en una pirueta de curiosidad, resulta que la única historia que me he leído del personaje de Allred es, precisamente, aquella en la que compartió cabecera con NExus y fue dibujada por Rude.
Saludetes,
Sergio
Tironcete d eorejas para los dos por esa animosidad hacia Madman, jejejeje
Saludos
Upssss...y yo que creía que me libraba ;)
Saludetes y bienvenido Guolberin,
Sergio
Pues nada, jefe. Convencido quedo.
Oye, y puestos a preguntar, recomiendas alguna edición en particular? Americana, la de Norma?
ya me dices.
Un saludo,
Si te refieres a los Archivos, depende de qué aspecto consideres: en cuanto a contenido ambas ediciones (americana y Norma) son idénticas. En cuanto a precio hay una pequeña diferencia, ya que cada tomo americano sale por 50$ (33€ según el cambio de hoy) y los de Norma a 25€.
Informado quedas.
Saludetes,
Sergio
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