Dibujo: VVAA
Editorial: Planeta DeAgostini
Formato: Libro Cartoné. 480 Páginas
Precio: 35€
Calificación: 9/10
Cuando uno ha leído sobre un tema tanto como yo lo he hecho sobre la Segunda Guerra Mundial. Cuando ha visto tanto cine como el que yo he consumido a lo largo de los años sobre dicho hecho histórico. Uno se termina creyendo dos cosas. La primera, que sabe todo lo que hay que saber al respecto del citado tema en cuestión, algo que la edad, las canas y la experiencia terminan afortunadamente por eliminar. Segundo, que con todo lo que ha consumido, ya sea en libros, cómics o películas, poco puede haber que le sorprenda. Con respecto al lustro que hoy nos atañe, la última vez que esto pasó fue con la que, a mi modesto entender, es la mejor "película" que se haya rodado jamás acerca de la contienda, la miniserie Band of Brothers: tan grandiosa es la serie, y tantos son los momentos de auténtico genio narrativo que alberga, que sus diez horas encierran la esencia de lo que toda historia acerca de la Segunda Guerra Mundial debería contener. Es por este y no por otro motivo por el que desde entonces (la primera vez que la vi fue en 2002) ningún libro, ninguna película y ningún cómic había sido capaz de colmar mis ansias de buenas historias bélicas. Al menos hasta que llegó Garth Ennis y lo cambió todo.
Si para desesperación de Mario, en las últimas recomicdaciones que había hecho con el autor no había sido muy benevolente con él (y es que ni Hitman, ni El Primer Vuelo del Águila Fantasma ni el último volumen de Punisher habían sido gran cosa), ahora tengo que situarme en el opuesto del espectro y alabar sin concesiones un volumen que recoge ocho historias sobre la guerra, situándolas en el marco de la Segunda Guerra Mundial y, en la que es la mejor de todas, en la España de la Guerra Civil. Pero no adelantemos acontecimientos y comencemos por el principio.
Y el principio supone comenzar a firmando que el Garth Ennis que encontramos en estas Historias de Guerra nada tiene que ver con el guionista macarra y salvaje de Predicador, Hitman o su primera incursión en Punisher. No encontraremos aquí nada del humor desenfrenado, cruento y sardónico que tan bien caracterizó a las citadas series, antes bien, nos daremos aquí de bruces con un Ennis más maduro si así se quiere y mucho más cercano a los postulados sobre los que trabajo para convertir a su magnífica estancia en Punisher una que quedará para el recuerdo. De esta forma, en Historias de Guerra no hay lugar para personajes extremos y deformados, ni sitio para los chascarrillos ni las chanzas, cada página rezuma dramatismo y seriedad por los cuatro costados, aportando a la lectura una gravedad asombrosa que no deja de sorprender por mucho que se avance en ella. Lo que si vamos a encontrar aquí es la extrema mala baba que el irlandés siempre aporta a sus guiones en la forma de unas historias cruentas, afiladas, frías y realistas en extremo.
Aunque Ennis explique de forma pormernorizada de dónde sacó la "inspiración" para cada uno de los relatos, y desgrane en el epílogo del tomo qué hechos de cada uno de ellos son reales y cuáles no, lo que resulta de todo punto innegable es que la imaginación de irlandés para recrear el mundo de hace casi setenta años es portentosa. Por las páginas de Historias de Guerra se pasean personas, que no personajes, para hacernos sentir así de la forma más cercana posible sus miedos e inquietudes, trasladándonos el escritor al fragor de una batalla aérea, a un socavón en medio de la nada o al frío polar del Ártico. Para ello, resulta indispensable la ayuda que le presta el elenco de artistas elegido para la ocasión: desde la sobriedad de Weston o Gibbons, al personal estilo de Ezquerra o Lloyd, resulta imposible afirmar que alguno de los dibujantes que deja su impronta sobre el papel sea inadecuado o no que no de todo lo que es capaz de dar de sí.
Decía arriba que de todas las historias, la que a este servidor le ha parecido la más redonda ha sido la que se desarrolla en España, pero no quiero cerrar está recomicdación resaltando una por encima de las otras siete, ya que le estaría haciendo flaco favor a la totalidad y compacidad de un volumen que nos coge, nos pone un uniforme, nos da un casco herrumbroso, un arma que se encasquilla cada tres disparos y nos coloca en mitad de la nada, rodeado de soldados de nuestro batallón y de otros ejércitos, y nos deja allí a nuestra suerte, contando con que nuestra imaginación sea lo suficientemente poderosa como para sacarnos de allí. Y eso no lo consigue cualquiera.
Si para desesperación de Mario, en las últimas recomicdaciones que había hecho con el autor no había sido muy benevolente con él (y es que ni Hitman, ni El Primer Vuelo del Águila Fantasma ni el último volumen de Punisher habían sido gran cosa), ahora tengo que situarme en el opuesto del espectro y alabar sin concesiones un volumen que recoge ocho historias sobre la guerra, situándolas en el marco de la Segunda Guerra Mundial y, en la que es la mejor de todas, en la España de la Guerra Civil. Pero no adelantemos acontecimientos y comencemos por el principio.
Y el principio supone comenzar a firmando que el Garth Ennis que encontramos en estas Historias de Guerra nada tiene que ver con el guionista macarra y salvaje de Predicador, Hitman o su primera incursión en Punisher. No encontraremos aquí nada del humor desenfrenado, cruento y sardónico que tan bien caracterizó a las citadas series, antes bien, nos daremos aquí de bruces con un Ennis más maduro si así se quiere y mucho más cercano a los postulados sobre los que trabajo para convertir a su magnífica estancia en Punisher una que quedará para el recuerdo. De esta forma, en Historias de Guerra no hay lugar para personajes extremos y deformados, ni sitio para los chascarrillos ni las chanzas, cada página rezuma dramatismo y seriedad por los cuatro costados, aportando a la lectura una gravedad asombrosa que no deja de sorprender por mucho que se avance en ella. Lo que si vamos a encontrar aquí es la extrema mala baba que el irlandés siempre aporta a sus guiones en la forma de unas historias cruentas, afiladas, frías y realistas en extremo.
Aunque Ennis explique de forma pormernorizada de dónde sacó la "inspiración" para cada uno de los relatos, y desgrane en el epílogo del tomo qué hechos de cada uno de ellos son reales y cuáles no, lo que resulta de todo punto innegable es que la imaginación de irlandés para recrear el mundo de hace casi setenta años es portentosa. Por las páginas de Historias de Guerra se pasean personas, que no personajes, para hacernos sentir así de la forma más cercana posible sus miedos e inquietudes, trasladándonos el escritor al fragor de una batalla aérea, a un socavón en medio de la nada o al frío polar del Ártico. Para ello, resulta indispensable la ayuda que le presta el elenco de artistas elegido para la ocasión: desde la sobriedad de Weston o Gibbons, al personal estilo de Ezquerra o Lloyd, resulta imposible afirmar que alguno de los dibujantes que deja su impronta sobre el papel sea inadecuado o no que no de todo lo que es capaz de dar de sí.
Decía arriba que de todas las historias, la que a este servidor le ha parecido la más redonda ha sido la que se desarrolla en España, pero no quiero cerrar está recomicdación resaltando una por encima de las otras siete, ya que le estaría haciendo flaco favor a la totalidad y compacidad de un volumen que nos coge, nos pone un uniforme, nos da un casco herrumbroso, un arma que se encasquilla cada tres disparos y nos coloca en mitad de la nada, rodeado de soldados de nuestro batallón y de otros ejércitos, y nos deja allí a nuestra suerte, contando con que nuestra imaginación sea lo suficientemente poderosa como para sacarnos de allí. Y eso no lo consigue cualquiera.
Sergio Benítez (313)
7 comentarios:
Flipo.
¿De verdad te ha gustado tanto?
Hay alguna historia chula como la del tiger de Johan.
Pero la mayoria son como mucho muy mediocres y tipicas.
A mi es que este guionista...
en fin...
para gustos estan los colores.
Pues sí, de verdad de la buena. Me parece que comparado con otras cosillas, no ya del guionista, sino de cómic bélico en general, este Historias de Guerra es la repera.
Pero cómo bien dices, seas quien seas (ainssss, mira que ni siquiera firmar el comentario), para gustos los colores.
Saludetes,
Sergio
Asi sí. Ennis bueno. Mu bueno. Un 9. Si es que de vez en cuando hasta aciertas.
Y solo darte la razon en todo lo que dices en la recomicdacion. Estas historias de guerra son la leche. Y no porque las haya escrito el amigo Ennis sino porque el ritmo, los dialogos y las situaciones son de lo mas grande.
Saludazos
Yo es que ya sabes que tengo a Ennis encasillado. Pero, claro, como aquí dices que no se le reconocen los típicos sellos de la casa y demás connotaciones típicamente ennnisnienses...
Tengo que reconocer que la mayoría de éste material lo leí presuntamente por cuestiones de material para el antiguo blog, y sin llegar a entusiasmarme, reconozco que no estaba mal del todo. Y teniendo en cuenta el precio y la cantidad de páginas no es mala oportunidad para ver la guerra en ojos ennisnianos.
Ahora faltaría ver si Panini se anima a sacar las series de Battlefields de Dynamite, que están cortadas por el mismo patrón y merecen la pena (sobre todo Dear Billy)
Saludos!
Mira que sois con Ennis...
Yo que queréis que os diga, el género bélico nunca me ha gustado, y menos en los comics...
Y encima 35 eurazos... va a ser que no, o por lo menos en mucho, mucho tiempo...
Un saludo,
Yo estoy mas o menos como Jose, las historias belicas no suelen atraerme, aunque claro, he leido un par de tomos de DMZ y me encanto (vale, no tiene na que ver, pero trata sobre una guerra tambien ¿no?).
Por la relacion calidad-cantidad-precio parece que es una buena compra, lo mismo me la apunto para la lista de reyes (si, hago una lista, sino mis padres acabarian comprandome "batman:rip","marvel zombies" o hasta "ultimatum").
ach so¡
un 9?????
y entonces que le das a cosas
como Ernie Pyke.
un 18 no?
Ennis se cree que la guerra es como
la cuentan en los violentos de Kelly y pelis de ese tipo y claro.
Y despues de expresar mi humilde opinion, queria felicitarlos por el blog y deciros que es una pena que no hagais aun mas reseñas porque son muy utliles y necesarias.
Jesus B.
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