jueves, 8 de octubre de 2009

CAIRO

Guión: G. Willow Wilson

Dibujo: M. K. Perker


Editorial: DC. Vertigo


Formato: Libro Rústica. 160 Páginas


Precio: $17.99

Calificación: 5.5/10


Dentro de esta afición nuestra, muchas veces resulta curioso observar los comentarios de críticos "serios" que las editoriales usan en las cubiertas de sus cómics en este caso para llamar la atención de potenciales lectores. Sinceramente, nunca he creído que tal maniobra funcione, y menos aún en un mundillo, el de los tebeos, en el que a los pocos días de salir un nuevo producto uno puede encontrar opiniones mucho más fiables, aunque es probable que menos sesudas, de lo que está dudando en comprarse o no. En el caso que nos ocupa, DC elige dos frases, una de el crítico de Los Angeles Times, otra del de School Library Journal que apuntan hacia las fuentes de las que bebe la historia pergeñada por Willow Wilson y al extraordinario debut que supone esta novela gráfica...yo no llegaría a tanto.

Para empezar, la periodista metida a guionista de cómics, crea un relato extraño, que entremezcla un trasfondo de crítica hacia la situación político-social de Oriente Medio con un primer plano pleno en fantasía y ciertas gotas de romance en el que hay lugar para magos negros y genios milenarios. Con este ambicioso objetivo inicial, Wilson arranca la acción presentándonos, como si de una novela de Agatha Christie se tratara, a los jugadores que van a intervenir en el misterio: una turista americana, un terrorista suicida en potencia, una soldado israelí, un camello de tres al cuarto y un radical periodista egipcio, a los que hay que añadir una pipa de agua con un genio dentro. Jugando inicialmente a su antojo con tan ecléctico grupo, a la guionista se le comienza pronto a ir su creación de las manos y el maritaje entre las diferentes subtramas no se produce de forma cómoda, fallando asimismo en que la adición de los elementos fantásticos se haga con sutileza y, sobre todo, en que el mensaje político no lastre un tramo final que se antoja algo estirado y demasiado orientado a un forzado happy ending que, la verdad, no pega ni con cola.

Aunque atesore algunas ideas que podrían haberse desarrollado mejor, la del Nilo debajo del Nilo queda algo pobretona, e incluso teniendo otras que si alcanzan todo su potencial, ese cofre que salvaguarda una palabra es la mejor de ellas por lo poético de su significado; la lectura de Cairo no es de esas que uno vaya a recordar dentro de poco tiempo, algo a lo que ayuda el que visualmente la novela gráfica no sea nada del otro mundo: si bien el artista turco sabe recoger con cierta precisión las emociones de los protagonistas según éstas se van sucediendo, falla en algo que el guión pide a gritos, atar la acción a una realidad menos limpia y más crispada, que quizás se hubiera olvidado de reproducir los escenarios del Cairo con la irregular precisión con la que lo hace, para volcarse más tapar los defectos narrativos del guión, cosa que Perker no consigue y que provoca esa sensación última de que todo el tebeo es un quiero y no puedo cargado de buenas intenciones.

Sergio Benítez (285)

3 comentarios:

Jose dijo...

Supongo que la sensación será comparable a la de terminar el primer tomo de AIR, que se queda en intenciones, ideas por pulir, y aburrimiento en general... y encima es una serie regular...

Me parece a mi que ese 5,5 le va a costar a Cairo que pasé olimpicamente de él...

. . dijo...

A mí en su día no me terminó de llamar la atención y lo dejé estar.

Ahora veo que fue una buena decisión...

Saludos!

sebelo2 dijo...

Pues yo a AIR ni le he metido mano después de lo poco que me cayó en gracia está y si me dices que encima es aburrida, pues reciprocidad: tú pasas de Cairo y yo ni le haré caso a AIR.
Y sí Nachete, fue buena decisión ;)
Saludetes,
Sergio