viernes, 30 de octubre de 2009

CHERI-BIBI

Guión: Pascual Bertho

Dibujo: Marc-Antoine Boidin

Editorial: Planeta DeAgostini

Formato: Libro Cartoné. 168 Páginas

Precio: 15.65€

Calificación: 8/10

Tres años después de escribir la obra por la que ha pasado a la historia de la literatura, la estupenda El Fantasma de la Ópera, Gaston Leroux se embarcaba en una serie de tres novelas en las que describía las increíbles aventuras de un hombre inocente constantemente culpado de crímenes que no cometió: Tras la primera novela, Leroux tenía pensado abandonar al personaje, pero el gran éxito que tuvo en su país natal, llevaría al autor a firmar los guiones de los diecinueve filmes de corta duración que se produjeron durante 1919, adaptándolos después al formato novelado. De ahí pasarían seis años hasta que el escritor volviera de nuevo al personaje, esta vez con una ficción política en la que también intervenía su hijo. De todo este material, lo que Pascal Bertho aprovecha, y cómo, es el primer libro (que aunaba a su vez las primeras serializaciones del personaje en el diario Le Matin), regalándonos un tebeo intenso y muy bien estructurado que se beneficia sobremanera de la maravillosa labor a los lápices de Boidin.

Bertho, del que ya habíamos hablado por aquí hace algún tiempo debido a la sólida labor que hacía al continuar las aventuras del Jim Hawkins stevensoniano en la estupenda Siete Piratas, refuerza aquí aún más la buena impresión que de él nos habíamos llevado al trasladar con precisión milimétrica el texto de Leroux al formato aviñetado: la historia se desarrolla a caballo entre Francia y la Guyana Francesa, centrándose aquí en Cayena, lugar que sirvió de prisión durante setenta años y del que es tristemente recordada la famosa Isla del Diablo (y todos los que hayan visto o leído Papillon saben de que les hablo). Allí conocemos al protagonista, un preso enorme que, acusado de un crimen que no cometió, fue trasladado a la región sudamericana, un lugar del que intentará escapar para regresar a su tierra natal. Recurriendo al flashback de forma constante para contarnos la historia de Cheri-Bibi, el guionista francés va desvelando poco a poco elementos de una trama que, aún contando con gran número de personajes y localizaciones, no produce sensación de pérdida en ningún momento. Permitiéndose trastocar sensiblemente la conclusión original de la novela, Bertho otorga quizás mayor coherencia a la misma, y deja al tiempo un final más abierto del que Leroux planteara para su obra.

Acompasada a la perfección en todos los sentidos con el guión de Bertho, la labor de Boidin es sin duda el aspecto más sobresaliente de Cheri-Bibi. Con un lápiz sumamente trabajado, que cuida al máximo la ambientación de principios del s.XX, Boidin se olvida de las tintas para dar color directo sobre el grafito, lo que otorga al cómic una cualidad visual fascinante. El estilo del dibujo, alejado de lo que se le puede ver en otros trabajos suyos como Endurance (que no sólo comparte título con la obra de Luis Bustos que recomicdamos por el mes de junio) o Kerioth, caricaturiza a los personajes sin que se pierda por un momento un ápice de naturalidad y realismo (atención a los fondos) en ellos, algo a lo que ayuda de manera indefectible el magnífico color infográfico con una paleta que no hace ascos a ninguna tonalidad.

Cheri-Bibi se alza como toda una inesperada sorpresa en un mes en el que el cómic franco-belga en España será eclipsado, qué duda cabe, por ese nuevo álbum de Ásterix que recomicdábamos hace unos días o por la magistral Diario de un Ingenuo. Hagánse un favor y, al margen de comprar las aventuras del galo y de Spirou, dénle una oportunidad a este fantástico título. No se arrepentirán.

Sergio Benítez (304)

7 comentarios:

. . dijo...

Pues no ibas totalmente desencaminado, dado que ignoraba su aparición. Si mi inconsciente no lo eclipsa hago firme promesa de ojearlo ésta misma parte.

Por cierto, voy a ver si me escribo un post-it, porque con tantas cosas para ojear seguro que me dejo algo...

Saludos!

sebelo2 dijo...

Pues sí, no sería de extrañar que te dejaras algo en el tintero. Ya me dirás si te la pillas o no.
Saludetes,
Sergio

Toni dijo...

yo lo tengo preparado para leerlo, con un cafelito y unas pastitas.
Saludos.

sebelo2 dijo...

Pues que te aproveche todo, tanto el café y las pastas como la estupenda lectura que es este Cheri-Bibi.
Saludetes,
Sergio

Marione dijo...

Cachis, la ultima vez que estuve en la tienda se me olvidó hojear este Chimichurri. La proxima vez le pego una visual.

Y ya me estoy imaginando a Toni sentado en un sofa orejero monoplaza, con su bata de cuadros y sorbiendo poco a poco su tacita de cafe a la par que emite un delicado "biusifor"

Saludazos

JA dijo...

Que pena que sea a formato pequeño pero aún así merece la pena. ¿Y que me dices del final? Acoj...

Toni dijo...

y te olvidas de la pipa, mario. Buena hierba de la comarca.
Saludos.