viernes, 2 de octubre de 2009

La LÍNEA de FUGA

Guión: Christophe Dabitch

Dibujo: Benjamin Flao

Editorial: Norma

Formato: Libro Cartoné. 120 Páginas

Precio: 17€

Calificación: 8/10

La Línea de Fuga es un cómic atípico. Y lo es por muchos motivos que intentaré desgranar en la presente recomicdación, aunque quizás el principal sea por su temática. Durante el año pasado hemos visto como se editaban cómics dedicados a cantantes (los hubo de Johnny Cash, Carlos Gardel o aquellos que incluían incluso un cd con música del artista en cuestión). Muchos son probablemente los que podemos encontrar centrados en figuras históricas (sobre todo políticas) o del deporte (ahí están el de Valentino Rossi de Manara o el de Jorge Lorenzo editado por Panini). Pero, ¿cuántos dedicados a homenajear la vida de un poeta podríais citar?. Es más, en la gran mayoría de los cómics sobre personajes reales se termina acudiendo de una forma u otra en algún momento al sesgo biográfico. Sabiendo esto, ¿cuántos de poetas seríais capaces de nombrar en los que el homenajeado ni siquiera apareciera?. ¿Alguien?. ¿Nadie?. Me lo imaginaba.

Rimbaud fue uno de los poetas que más me fascino en una época en el que la prosa había dejado de atraerme y me volqué en descubrir autores en verso que pudieran saciar mis ansias lectoras: personaje controvertido, de declarada homosexualidad y vida disoluta, la existencia de Arthur Rimbaud nunca fue fácil, ya que su familia (madre y hermana) nunca fueron capaces de aceptar el carácter de enfant terrible del poeta. Su paso fulgurante por el mundo del verso se reduce a cuatro años de una corta vida (murió a la edad de treinta y siete), tiempo más que suficiente para que su influencia en las corrientes decadentistas y simbolistas fuera más que notable. Pero la importancia real de la obra de tan insigne poeta, de obscura métrica cargada de múltiples significados, vino después, influyendo a personajes tan relevantes del mundo de la cultura como Henry Miller, William S. Burroughs, Pasolini, Hugo Pratt, Jim Morrison, Kurt Cobain o Bob Dylan.

La Línea de Fuga parte de la invención de un poeta adscrito al grupo de seguidores con el que Rimbaud contó en vida. Adrien, pues ese es su nombre, es un personaje lleno de las contradicciones propias de la poesía del autor al que admira que se ve obligado a plagiarlo con algunos versos apócrifos que se llegaron a publicar en una revista llamada El Decadente, que durante tres años quiso unirse a la vanguardia poética y sacó a la luz seis supuestos poemas del autor encontrándose de frente con Verlaine, el mentor y amante de Rimbaud. En esta tesitura, Dabitch, jugando a mezclar realidad y ficción sin que en ningún momento notemos la diferencia, coge a Adrien y lo embarca en su particular viaje a El Corazón de las Tinieblas, jugando como hiciera Conrad a dotar al poeta de un fuerte carácter simbólico: no es tanto para encontrar a su ídolo como para encontrarse a si mismo para lo que le servirá al protagonista la odisea en la que se embarca casi sin pretenderlo.

Por el camino, y trufando la narración con pasajes de dos de sus obras más reconocidas (Una Temporada en el Infierno y El Barco Embriagado) entre otras, Dabitch consigue enganchar al lector con un tebeo en el que el juego con el espíritu de la decadencia está tan presente como el de la simbología, representada esta última con las ensoñaciones en las que el protagonista imagina hablar con el jefe de la revista, uno de sus compañeros y el propio Verlain, encarnados cada uno de ellos en un sapo, un cisne y un viejo pájaro. Y dando buena cuenta de todo ello en el terreno visual encontramos a un Benjamin Flao fascinante. El dibujante (un total desconocido para el que esto suscribe), emprende la labor de adaptar a imágenes el complejo guión de Dabitch mediante un trazo de gran soltura y naturalismo que hace gala de una narración portentosa, en la que las composiciones van ajustándose al ritmo de la historia, no cerrándose el artista a ninguna estructura y concretando en su conjunción con el guión un tebeo al que sin duda alguna habrá que volver en un futuro pues, al contrario de lo que afirmaba el señor Foix de manera despectiva, de este cómic si hay mucho que aprovechar.

Sergio Benítez (281)

4 comentarios:

. . dijo...

Yo es que sigo sin hablarme contigo ¿sabes? Hasta que no me compre éstas cosas...

Saludos!

sebelo2 dijo...

Ya...bueno...pues entonces no te digo nada. Cuando lo creas conveniente te pasas por la tienda y después lo comentamos con tranquilidad :P
Saludetes,
Sergio

comiquera dijo...

Tienes un premio en nuestro blog por comentar con rigor cómics de calidad que engrandecen el noveno arte. Puedes pasar a recogerlo por allí.

Un saludo y nos leemos.

sebelo2 dijo...

Pues muchísimas gracias Comiquera, ya lo he recogido con gusto. Esperámos seguir durante mucho tiempo manteniendo el blog a la altura que todos nuestros lectores os merecéis.
Saludetesm
Sergio