Dibujo: Albert Uderzo
Editorial: Salvat
Formato: Álbum Cartoné. 56 Páginas
Precio: 12€
Calificación: 6/10
Si algo ha quedado bien patente por activa y pasiva desde que René Goscinny falleciera allá por 1977 es que, sin él, Astérix nunca volvió a ser lo mismo. Bien es cierto, y no vamos ahora a restarle méritos a Uderzo, que desde el último álbum de las aventuras del galo que ambos idearon juntos, alguno ha habido que ha sabido capturar de nuevo la esencia del humor que tan bien sabía destilar el guionista, y títulos como La Gran Zanja, La Odisea de Astérix o Astérix en la India, atesoran mucho de lo que hizo grande al personaje. Lamentablemente, el nivel del resto de la producción de Uderzo en solitario nunca ha sabido estar a la altura, al menos en lo que a guión se refiere (porque en lo visual el artista no ha hecho más que seguir sorprendiéndonos), siendo en este sentido El Cielo se nos Cae Encima la muestra más olvidable de ello, con una historia sin pies ni cabeza en la que el dibujante arremetía contra los dibujos animados, los superhéroes o el manga....vamos, contra todo que alguna vez haya hecho sombra al héroe galo.
Anunciado a bombo y platillo, este álbum que conmemora el cincuenta aniversario de la creación de uno de los personajes más universales del cómic mundial suponía un hálito de esperanza en la tónica que la serie venía arrastrando, ya que se "suponía" que parte del mismo venía guionizado por Goscinny. Pero la expectativa previa se da de bruces con la cruda realidad cuando uno abre el álbum, lo repasa por encima, y descubre que lo que está atribuido al genial guionista no es más que una anecdótica Guía de Viajes Coquelus, aparecida en la revista Pilote en 1966. Con el jarro de agua fría que eso supone antes incluso de empezar la lectura, se pueden imaginar las ganas con las que acometí ésta.
Intentando dejar de lado los prejuicios lo cierto es que por mucha voluntad que se le ponga, lo mejor que se puede decir de este Aniversario de Astérix y Obélix es que es anodino hasta el cansancio, aunque tengo mis serias dudas acerca de si afirmar eso es bueno o no. La historia, si es que hay tal, gira en torno a la irreductible aldea y a cómo se prepara para celebrar el cumpleaños de sus dos miembros más conocidos. Para ello, Uderzo recurre a una narración fragmentada, más ocupada en lo anecdótico que resulte ver a personajes que hacía tiempo no salían en la serie (por ejemplo Numerobis, el arquitecto de Astérix y Cleopatra) que en tratar de hilar un discurso coherente. Así, y tras un prológo simpático, en el que se nos ofrece una visión de que habría pasado si los personajes hubieran envejecido a un ritmo natural, el dibujante se dedica a ir de aquí para allá sin rumbo fijo, metiendo con calzador chistes contemporáneos totalmente descontextualizados (lo del Operación Triunfo con Asurancetúrix es de juzgado de guardia) y ofreciéndonos un final abrupto que no hace sino corroborar lo casual de toda la confección del álbum.
Con un dibujo al que no se le puede sacar ni una falla (magníficas las versiones de pinturas famosas con esos personajes que tanto hemos llegado a querer), El Aniversario de Astérix y Obélix debería ser, ya sí, la despedida definitiva del personaje, antes de que Uderzo pueda alcanzar cotas más bajas en cuanto a la historia. Pero claro, ¿cómo renunciar a la gallina de los huevos de oro?. Es por esto que rumores muy fehacientes apuntan a que si bien el dibujante se retiraría definitivamente después de este álbum, la serie seguiría en otra manos. Quién sabe, quizás sea esta la forma de resucitar a los galos para las futuras generaciones...¿alguien ha dicho Munuera como dibujante?
Anunciado a bombo y platillo, este álbum que conmemora el cincuenta aniversario de la creación de uno de los personajes más universales del cómic mundial suponía un hálito de esperanza en la tónica que la serie venía arrastrando, ya que se "suponía" que parte del mismo venía guionizado por Goscinny. Pero la expectativa previa se da de bruces con la cruda realidad cuando uno abre el álbum, lo repasa por encima, y descubre que lo que está atribuido al genial guionista no es más que una anecdótica Guía de Viajes Coquelus, aparecida en la revista Pilote en 1966. Con el jarro de agua fría que eso supone antes incluso de empezar la lectura, se pueden imaginar las ganas con las que acometí ésta.
Intentando dejar de lado los prejuicios lo cierto es que por mucha voluntad que se le ponga, lo mejor que se puede decir de este Aniversario de Astérix y Obélix es que es anodino hasta el cansancio, aunque tengo mis serias dudas acerca de si afirmar eso es bueno o no. La historia, si es que hay tal, gira en torno a la irreductible aldea y a cómo se prepara para celebrar el cumpleaños de sus dos miembros más conocidos. Para ello, Uderzo recurre a una narración fragmentada, más ocupada en lo anecdótico que resulte ver a personajes que hacía tiempo no salían en la serie (por ejemplo Numerobis, el arquitecto de Astérix y Cleopatra) que en tratar de hilar un discurso coherente. Así, y tras un prológo simpático, en el que se nos ofrece una visión de que habría pasado si los personajes hubieran envejecido a un ritmo natural, el dibujante se dedica a ir de aquí para allá sin rumbo fijo, metiendo con calzador chistes contemporáneos totalmente descontextualizados (lo del Operación Triunfo con Asurancetúrix es de juzgado de guardia) y ofreciéndonos un final abrupto que no hace sino corroborar lo casual de toda la confección del álbum.
Con un dibujo al que no se le puede sacar ni una falla (magníficas las versiones de pinturas famosas con esos personajes que tanto hemos llegado a querer), El Aniversario de Astérix y Obélix debería ser, ya sí, la despedida definitiva del personaje, antes de que Uderzo pueda alcanzar cotas más bajas en cuanto a la historia. Pero claro, ¿cómo renunciar a la gallina de los huevos de oro?. Es por esto que rumores muy fehacientes apuntan a que si bien el dibujante se retiraría definitivamente después de este álbum, la serie seguiría en otra manos. Quién sabe, quizás sea esta la forma de resucitar a los galos para las futuras generaciones...¿alguien ha dicho Munuera como dibujante?
Sergio Benítez (300)
7 comentarios:
Muy mal, Sergio. Muy mal. Se trata de tu entrada 300. En lugar de ésto deberías de estar hablando de tipos musculados y barbudos que se van de cena al infierno... Pero, en fín!
Mi mala estrella viñetera ha hecho su aparición una vez más perjudicándome en mi intento de adquirir éste tomo. Aún sabiendo desde el mismo momento del anuncio de su publicación que tenía un noventaycien por cien de probabilidades de ser un truño. Pero el completismo nos puede...
A ver si ahora que el tema de los derechos del personaje ya no son dictatorialmente propiedad de Uderzo se consigue que alguien le escriba guiones decentes a éste gran ilustrador.
Porque, aunque haya pasado con Spirou, Los Pitufos, Lucky Luke y algunos personajes más en los que la vida de la creación ha seguido sin sus creadores y no ha sido como para rasgarse las vestiduras, en lo más profundo de nuestro corazoncito seguimos pensando que Asterix debe de ser de Uderzo y Goscinni. Y los nuestros ojitos están acostumbrados al grafismo de Uderzo, mal nos pese los petardos de historias con las que nos delita (sip, delita, de ser un delito).
Saludos!
"Se trata de tu entrada 300. En lugar de ésto deberías de estar hablando de tipos musculados y barbudos que se van de cena al infierno..."
He tardado un rato en pillarlo... eso es por que es Lunes. Hace siglos que dejé de leer algo de Asterix. En realidad para mi fueron mis comienzos tebeisticos: mortadelo, superlopez, asterix... se puede decir que con ellos me desvirgue (jojojo que guarro suena! xD), pero aparte de superlopez, Asterix dejó de entretenerme y divertirme del mismo modo. Supongo que será por que su autor original la palmo.
Digo yo.
Qué queréis que os diga que no haya dicho ya en la reseña...pues que yo, como muchos, me crié de pequeño con un Astérix en una mano y un Tintín en la otra, y que por este motivo forman parte indeleble de mi infancia tanto como los Mosqueperros, Mazinger, Marco u Orzowei. Y quizás sea por esto que a este Astérix tan soso le tenga tan poco cariño, no sé...
Y con Superlópez me pasó algo muy parecido, la última aventura que me divirtió una barbaridad fue los Petisos, y antes de esa, la de Viaje al Centro de la Tierra y todas las que la antecedieron. Después de los Petisos Superlópez dejó de ser lo que había sido hasta entonces, y aunque tengo la gran mayoría de los álbumes, nunca he llegado a disfrutarlos plenamente.
Saludetes a los dos,
Sergio
Y menos mal que han metido mano con las traducciones en cada país, como no puede ser menos en España a uno de los personajes le querían poner el nombre de chiquito de la calzada, vergonzoso.
sau2
Munuera al dibujo y Emile Bravo al guión, por ejempo............mucho divagar resultan estas conjeturas.
A mí Asterix en la India me gusto. Pero cuando empiezo a leer alguno malo de Uderzo lo cierro y vuelvo a cualquiera de los goscinny....!!Que grandes!!
Ah...feaciente en con h intercalada.
Saludos.
Saludos.
Pues no sé que deciros... para mi, Asterix ya terminó hace años.
Y desde entonces, y por miedo al efecto superlopez (que tb paré en viaje al centro de la tierra) no he vuelto a pillarme ningún album nuevo...
Saludos
Yo los últimos no los he leído. Ni ganas, la verdad.
Por cierto, que se dice que el retiro de Uderzo sería sólo parcial, cediendo el dibujo a los hermanos Frédéric y Thierry Mébarki mientras él seguiría encargándose del guión, para mayor sorpresa...
Sinceramente, si otras manos no han de tocar la figura de Asterix porque sus autores así lo han decidido, que esto se acabe ya y con un poco de dignidad.
Saludos!
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